43 VIVIENDAS SOCIALES EN IBIZA
La voluntad de conseguir viviendas que no requieran de sistema activo de calefacción ni de refrigeración ha condicionado toda la propuesta. Desde la orientación del edificio hasta el sistema constructivo.
El sistema constructivo de muros de carga con bloques de tierra compactada (BTC) de 20cm de espesor con una densidad de unos 2000kg/m3 ofrece mucha inercia, una masa suficiente como para resolver la acústica entre vecinos con una sola hoja y una baja huella de carbono. Además las arcillas le confieren un
comportamiento higrotérmico que permite regular la humedad del ambiente, que en verano sobrepasa el 80%, disminuyéndola hasta valores del 55%.Respecto al forjado unidireccional, aunque en el concurso se planteó de madera, en de desarrollo del proyecto se apostó por el hormigón para incrementar la inercia. A través de la geometría nervada, con vigas tablón prefabricadas de 10x20cm cada 80cm y una capa de compresión de 5cm, se aumenta la superficie de disipación y se reduce la cantidad de materia y su huella incorporada, tratándose de un forjado con un espesor equivalente a una losa de 10cm de hormigón con un canto útil de 25cm.
En un entorno heterogéneo sin un tejido urbano muy definido, la propuesta prioriza el asoleo y la orientación al mar para buscar los vientos dominantes del Embat de día y el Terral de noche. Tres unidades de agregación de hasta cuatro viviendas por rellano, organizadas alrededor de un patio, permiten que todas las tipologías tengan ventilación cruzada. Se trata de una propuesta de alta densidad, que concentra la edificación en una pieza, cuya escala dialoga con los edificios del entorno. Pero, a la vez, adquiere un grano más pequeño de retranqueos, acorde con el volumen de las viviendas unifamiliares vecinas, a través de discontinuidades que favorecen el uso de las azoteas como terrazas o cubiertas vegetales. El resultado es una volumetría articulada, de profundidad y altura variable, que multiplica el número de esquinas –vórtices– del edificio para incrementar la velocidad del aire. Esta solución mejora la ventilación en un clima como el de Ibiza, de inviernos suaves, en el que preocupa especialmente el comportamiento del edificio en verano.
El proyecto plantea un sistema de habitaciones comunicantes al tresbolillo, insertadas entre los muros de
carga principales y de traba, de manera que la estructura conforma el espacio. El sistema no distingue entre la agregación y las unidades de vivienda sino que pone en valor la habitación como unidad espacial y proyectual. Cada módulo de 4mx3m consta de 12 m2 de superficie, indistintamente del uso. Las unidades constan de entre cuatro y seis módulos, respondiendo a un programa de vivienda social de uno, dos y tres dormitorios. El resto de compartimentación así como las puertas y carpinterías se plantean de madera de alerce que contrasta con la crudeza de la tierra.